En el Día Mundial de la Libertad de Expresión
Reporteros Sin Fronteras (RSF) advierte en su informe anual de 2025 que la libertad de prensa mundial atraviesa su peor momento desde 2002, con solo uno de cada cuatro países ofreciendo condiciones favorables para el periodismo. España mejora su posición histórica, pero enfrenta desafíos persistentes, mientras que la Unión Europea muestra contrastes y América Latina sufre retrocesos alarmantes.
España alcanza su mejor posición histórica, pero persisten desafíos estructurales
España ha escalado al puesto 23 en la Clasificación Mundial de Libertad de Prensa de RSF, su mejor posición hasta la fecha. Este avance se atribuye a mejoras en los indicadores sociocultural, político y de seguridad. Sin embargo, persisten problemas significativos como la precariedad laboral en el sector periodístico, presiones judiciales y la falta de reformas legales, especialmente en relación con la «Ley Mordaza», cuya derogación sigue pendiente.
Europa mantiene liderazgo, pero enfrenta desafíos internos
Europa sigue siendo la región con mejores condiciones para el ejercicio del periodismo, especialmente dentro de la Unión Europea. No obstante, la situación es desigual: mientras países como Noruega lideran la clasificación por noveno año consecutivo, otros como Francia enfrentan preocupaciones por la concentración mediática. Alemania ha registrado un número récord de incidentes violentos y detenciones de periodistas, y Grecia se mantiene en el último puesto de la UE debido a la vigilancia a periodistas mediante software de espionaje.
América Latina: retrocesos y amenazas a la libertad de prensa
La región de América Latina ha experimentado un fuerte retroceso en la libertad de prensa. México encabeza la lista de países con más periodistas desaparecidos y es el tercer país con más periodistas asesinados. En Guatemala persiste la criminalización de periodistas, a pesar de algunos avances bajo el gobierno de Bernardo Arévalo . Otros países como Cuba, Nicaragua y Venezuela continúan sometiendo al periodismo a censura y represión estatal.
Factores globales que agravan la situación
RSF destaca que la crisis económica que afecta a los medios de comunicación, junto con el dominio de grandes plataformas tecnológicas que acaparan la publicidad digital, ha debilitado la independencia de los medios tradicionales. Además, el avance de la desinformación y el uso de tecnologías como la inteligencia artificial generativa han sacudido el ya frágil universo de los medios, exacerbando las amenazas a la libertad de prensa a nivel mundial.
Llamado a la acción para proteger el periodismo
Ante este panorama, RSF hace un llamado urgente a los gobiernos y actores sociales para proteger la libertad de prensa. La organización enfatiza que sin independencia económica y sin un entorno legal que garantice la seguridad y la libertad de los periodistas, no puede existir una prensa libre. La defensa del periodismo independiente es esencial para el funcionamiento de las democracias y para garantizar el derecho de los ciudadanos a estar informados.