La mediación notarial no siempre es posible para la resolución de cualquier tipo de conflicto. El notario puede ejercer de mediador en casos de conflicto civil, mercantil o familiar.
En cuanto a la mediación civil, la presencia del notario mediador es posible para resolver reclamaciones de responsabilidad civil, conflictos entre coherederos y/o copropietarios, así como para conflictos que se puedan dar en contratos bancarios, hipotecarios, de seguros, de compraventa de vivienda o de arrendamiento.